Con una resaca terrible me levante a las 7am y a las 7.15 un tuck-tuck me estaba llevando a la estacion Norte de buses para agarrar el VIP a Luang Prabang. De VIP solo tenia una botella de agua y un almuerzo berreta en un parador carretero. El viaje de diez horas fue durisimo en una carretera de montana y en malas condiciones. Dentro, una pareja Escandinava, unos Ingleses y un Belga, Steeve, con el que recorri la ciudad durante tres dias.
Llegamos de noche y tras caminar un rato encontramos un Guest-House cerca del centro, un mercado impresionante ocupaba toda la calle principal con puestitos de comida muy baratos alrededor sirviendo jugos exprimidos, buffets vegetarianos y sandwichs. Cenamos por ahi y volvimos a dormir al hostal.
La manana siguiente amanecio lloviendo a cantaros y no paro durante todo el dia. Desayune en un café unas tostadas con manteca y dulce y un te con leche. Hasta el mediodia no me levante de la mesa que daba contra la ventana, me quede leyendo el Bangkok Post y despues escribiendo en la Mole. Volvi al hostal a leer un rato y dormir una siesta. Asi se pasan las horas cuando no deja de llover.
Me levante de la siesta y fui a comer algo, una brochette de pollo y un licuado de banana con leche. Averigue pasajes de vuelta a Vientiane e internetie un rato. A la tarde me toco sesion de masaje y despues cenamos con el Belga en un buffet vegetariano callejero.
En el Segundo y ultimo dia para recorrer el pueblo nos toco un lindo dia. Cuando sale el sol te moris de calor asi que un dia nublado es bienvenido.
Luang Prabang esta muy bien conservada, por ende lo mas interesante que tiene son las construcciones antiguas y las villas francesas que quedaron en pie. El pueblo esta ladeado por el Mekong y un rio secundario que se mezclan en una punta del pueblo creando una corriente bastante fuerte.
Dentro del pueblo los mercados y tiendas abundan, como los cafes, restos y boulangeries. Las donas venden grandes barras de pan y alguna que otra patisserie. Al mediodia las minorias etnicas bajan al pueblo para vender o comprar provisiones. Vestidos con atuendos muy coloridos las mujeres cargan a los bebes en su espalda y se los ve perplejos, dando la sensacion que no se sienten comodos ni en un pueblo tan pequeno como Luang Prabang. Vienen de las pequenas y humildes aldeas sobre la ruta que llega hasta Vientiane, no conocen de la electricidad y viven como lo hicieron sus abuelas y generaciones antiguas.
El dia paso tranquilo, saque un par de fotos, almorce en la calle y compre el billete de vuelta a Vientiane que salia esa misma tarde a las siete. En el bus conocimos a un Brasileno y nos hospedamos todos en el mismo hostal de Vientiane. La vuelta fue incomoda pero mucho mas tranquila.
A las seis de la matina ya estabamos de vuelta en la capital. Dia perfecto. Dormimos hasta al medioda, almorzamos de puta madre en un resto Indio, tomamos unos licuados y me despedi de ellos que seguian viaje por Tailandia.
Saque plata en un hotel ya que todos los ATM’s de la ciudad no funcionaban, actualice el blog y compre provisiones para el viaje largo hasta Camboya: unas oreos, Rex, pasta de dientes, chicles y un shampoo. El bus no salia hasta las siete de la tarde asi que me quede el resto de la tarde escribiendo sobre el rio y disfrutando del ultimo atardecer en Laos.
La aventura por Laos no iba a terminar ahi, pero eso yo no lo sabia.
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